Valeria Castro, la cantautora del volcán
Valeria Castro, la cantautora del volcán

Ruth de Frutos

16 noviembre 2023

El pandero cuadrado en mano, la voz vibrando y el público tocando palmas como si los acentos canario y andaluz se fundieran al son de su música en el Teatro Cervantes. El buen hacer de Valeria Castro enamoró al público malagueño a principios de octubre. Hoy, la cantante espera ser una de las sorpresas de los Grammy Latinos en Sevilla.

La vida de Valeria Castro (La Palma, 1999) ha cambiado mucho en los últimos seis años, pero sus melodías, disfrute y temple siguen estando muy cerca de la niña que jugaba en la Isla bonita, aquella que dejó para estudiar Biotecnología en Madrid. Fue el 8 de agosto de 2017 cuando las redes sociales hicieron su magia.

La compositora estaba en el aeropuerto esperando a su hermana y se sorprendió ante el número de notificaciones que se encadenaban en su móvil. Alejandro Sanz había compartido su particular “Desde cuándo”, lo que había provocado una oleada de interés hacia las versiones que la cantante subía a sus cuentas.

Desde entonces, la música se convirtió en la prioridad para esta cantautora, hasta llegar hace unas semanas a su primera nominación a los Grammys Latinos de hoy en Sevilla, en la categoría de Mejor canción de cantautor, coincidiendo con el aniversario de la erupción del volcán en su isla natal.

La Raíz” evoca la importancia de seguir adelante tras los cuarenta y dos días que duró el eructo en el Parque Natural de Cumbre Vieja, conocido por la variedad de especies vegetales y animales protegidas. Antes y después de que la interpretase en el Cervantes, vecinas de la isla contaron su experiencia en uno de los momentos más emotivos de la noche en Málaga el pasado 7 de octubre: “La vida sigue, con mucha tristeza, pero sigue…”, afirmaba la última voz antes de continuar con el repertorio.

Si bien nadie de su familia tenía formación musical, Castro comenzó a interesarse desde muy joven por este arte. Con cuatro años, sus padres le inscribieron en la Escuela Insular de Música de la Palma. El coro, la guitarra y el piano se simultaneaban con una infancia feliz en la que se escuchaba Joan Manuel Serrat en casa y en la que la cantautora hacía sus primeras incursiones en el folclore canario, seña de identidad de su música en la actualidad. Son las versiones de estas canciones las que empezaron a ser publicadas por Castro en redes sociales y las que se convirtieron en la antesala del EP Chiquita (2021) y después de lo que se convertiría en su primer disco, Con cariño y cuidado (2023).

El debut discográfico de Valeria Castro es una muestra de sus intenciones y compromiso social. Concienciada de las injusticias y consciente de su origen palmero, su primera canción “Ay amor” no solo refleja el drama migratorio, sino también recuerda, sin quererlo, la herida del volcán. La denominada Playa nueva o la playa de los viernes, una de las localizaciones del videoclip de este tema, desapareció devorada por las colas del volcán en 2022.

“Sin que nadie le enseñase un solo mapa, él cruzó” es uno de los versos de esta canción, que podría ser la historia de cualquiera de las 3.000 personas que arribaron a las costas canarias en los primeros seis días de octubre, lo que supone 18.000 en todo el año, por encima de los 15.682 registrados durante todo 2022, según cifras oficiales. La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) denuncia que son miles las personas que no sobreviven a una de las rutas migratorias más peligrosas y letales del mundo.

Sin ningún afán de romantizar lo que ya no es, pero sí reconociendo la importancia de la memoria, las referencias a su campo, a la tierra y a la raíz son una constante en el primer disco de Castro. El imaginario isleño de la artista no solo se dibuja a través de palabras que fueron compuestas cuando tenía entre 22 y 23 años, sino también en los instrumentos que la acompañan: su pandero cuadrado, así como la guitarra; los teclados de Laia Muñoz, el ronroco y la guitarra acústica tocada por Pablo Cáceres; el contrabajo de Marco Miemietz y la percusión de Iván Mellén.

De izquierda a derecha, Pablo Cáceres, Valeria Castro y Marco Miemietz./ Foto: Álvaro Cabrera.

Entre los distintos escenarios sonoros que plantea la cantautora, destaca la percusión a través de distintos instrumentos o del propio corazón, que palpita gracias a los golpes del micrófono en el pecho de Castro, el pandero es tocado por la cantante en tres canciones con el objetivo de que los sones de su archipiélago retumben allá donde canta. Un camino de ida y vuelta que no deja indiferente a ningún tipo de público, pero que el malagueño reconoce y acentúa gracias a las palmas que brotan de forma natural en varios momentos del concierto.

“Esta canción se la compuse a las dos mujeres que han sido mis referentes: mi madre y mi abuela”. Así presentaba la artista uno de sus temas más conocidos, “Guerrera”, con el que rinde un homenaje a las dos mujeres que “la han hecho lo que soy” pero que, tras compartirla con el público “ahora es de todas las hijas, madres y abuelas”.

Como la canción de Julio Numhauser que inmortalizó Mercedes Sosa, y que homenajea en su concierto Castro, “Todo cambia». “La música para mí es un proceso de sanación, o de autosanación”, reconoció en el concierto de Málaga, antes de presentar la canción “Cuídate”, en la que lamenta la lejanía y habla directamente a su familia. “Es la primera vez que toco en el Cervantes, pero no la primera que estoy aquí”, reconoce Castro, quien saluda a su tío, quien se casó en la capital de la Costa del Sol y que vuelve a recordar la importancia de la familia para la cantante.

Ahora es ella la que escucha sus canciones en otras voces. El pasado verano fue la protagonista de #EnjoyTheProcess, un laboratorio artístico y multidisciplinar de la Escuela Superior de Artes Escénicas de Málaga. “Para mí, escuchar diferentes versiones de mis canciones es algo muy sorprendente, pero muy natural. Yo nací de hacer versiones y me veo muy reflejada en todas ellas y creo que es bonito escuchar tu voz en las canciones de otros para luego contar tus historias más adelante”, afirmaba en el primer capítulo del proyecto. 

Valeria Castro invita a cantar al público malagueño durante su concierto./ Foto: Álvaro Cabrera

Mientras Valeria Castro, sigue su gira y participa en otros proyectos, como la canción central de la banda sonora de la película El amor de Andrea, presentada en la 68º edición de la Semana de Cine Internacional de Valladolid (SEMINCI) junto con los componentes de Vetusta Morla, la cantautora del volcán espera esta noche como agua de mayo, cuando en Sevilla se haga público el palmarés de los Grammy Latinos.

Ruth de Frutos

Ruth de Frutos

Periodista e investigadora. Enredo sobre derechos humanos en La Poderío. I Premio de Periodismo Social "Alberto Almansa" en la categoría de periodismo ciudadano por el artículo "Málaga no se vende, se alquila al mejor postor" y finalista del IX Premio Internacional Colombine por "Alicia, Carmen y Pilar en la ciudad de las maravillas (para ellos)", escrito con mi comadre Laura Rueda.

Entradas relacionada

Mamacruz, dueña de la propia vida

Mamacruz, dueña de la propia vida

Mamacruz está hecha de conciencia y transgresión. De amor y sororidad. De una comprensión de la sexualidad como parte de la creación de la identidad humana. De un espacio de libertad sin edad que suelta el corazón, eriza el vello y nos ilumina en la gloria. Digan lo que digan los estrógenos, con la adecuada información, ilusión y pericia, el cielo es nuestro,

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies