La represión franquista durante la posguerra obligó a Manuela Díaz Cabezas a echarse al monte antes de ser apresada y cumplir casi 20 años en las cárceles de la dictadura.
Manuela Díaz Cabezas nació un 11 de diciembre de 1920 en Villanueva de Córdoba, municipio cordobés. Esta cordobesa se casó con Miguel López Cabezas, ‘el Parrillero’, al que apresaron y torturaron salvajemente en 1939, en el primer aluvión de detenciones en el pueblo tras finalizar la Guerra Civil. Un mes después de la detención, fue puesto en libertad.
La posguerra no fue un período fácil y las detenciones no cesaban. Justo antes de ser apresado por segunda vez, Miguel decidió echarse al monte. Allí, para subsistir, formó la partida de guerrilleros conocida como «los Parrilleros«, junto a otros que también habían huido del infortunio de la prisión y el franquismo.
Durante un tiempo, Manuela fue su enlace: les daba comida, víveres, herramientas para subsistir y la información que llegaba a sus manos para protegerlos. Así, resistieron un año y medio hasta que Manuela fue también apresada, torturada y rapada para que confesara el lugar donde se encontraban Miguel y ‘los Parrilleros’. Manuela guardó silencio, sabiendo que de su resistencia dependía la vida de su marido, pero también del resto de la cuadrilla.
Después de un tiempo de acoso y derribo, de detenciones y torturas, Manuela y su hermano Alfonso, que huía del servicio militar franquista, se unen al grupo de «los Parrilleros» en marzo del 43. Por aquel entonces, a quienes tenían un pasado como militantes de izquierdas, los mandaban a los frentes más peligrosos en unas condiciones lamentables, con palizas y torturas diarias, incluso hasta llegar a la muerte como le ocurrió a dos personas del pueblo.
Manuela dejó a sus dos hijos a cargo de su madre, y así llegó a la sierra embarazada de nuevo. Otros ya se habían unido, como José Antonio Cepas ‘el Lobito’, ‘el Coqueo’,‘el Borrica’,‘el Álvarez’. Este último había llegado de Burgos, justo cuando había conseguido huir del tren que lo llevaba al lugar de su fusilamiento.
Durante un tiempo, vivieron errantes en varios lugares como la sierra de Fuencaliente en Sierra Morena, el cerro de los Puntales, Ciudad Real, Jaén, los valles de Alcudia y de Ventillas.
Fue a comienzos de 1944 y cerca de la finca de Che, cuando Manuela bajó al río y en pleno invierno, ella sola tuvo que parir al varón que por no poder alimentarlo, lo entregó en el cortijo de Molina Fernández. Sin embargo, el bebé moriría un año después.
Emboscadas
En febrero de 1944 fue asesinado Miguel ‘el Parrillero’, en un encuentro con la Guardia Civil en la sierra de Fuencaliente. A partir de entonces, la guerrilla intentó sobrevivir como pudo, dado que fueron varios quienes decidieron irse por otro lado y abandonar el grupo.
Manuela, Alfonso, ‘el Lobito’ y ‘el Borrica’ siguieron juntos, hasta que en diciembre de 1944 fueron apresados en una emboscada de la Guardia Civil. Se encontraban de camino a la Casa Forestal, en Fuencalientes. En busca de víveres para sobrevivir, se cruzaron con un mozo que les advirtió de que por allí había un destacamento de la Guardia Civil. El grupo decidió abandonar el plan y dirigirse a otro cortijo, al de los Herraderos, que no estaba muy lejos.
En ese momento, la Guardia Civil y los Forestales, avisados de la presencia de los maquis (seguramente por el mozo), rodearon el cortijo y empezaron a disparar, hasta que el grupo se rindió. Solo ‘el Borrica’ huyó a tiempo, siendo el resto detenidos. Alfonso y ‘el Lobito’ serían fusilados al poco tiempo, mientras que Manuela logró sobrevivir en la cárcel, siendo trasladada varias veces.
En 1961, Manuela salió en libertad, después de 17 años en prisión, viajando por varias cárceles del Estado español. Muere en 2006, llevándose con ella el recuerdo de una vida de guerrillera, supervivencia y muchos pesares.
*Más info:
https://cordobapedia.wikanda.es/wiki/Manuela_D%c3%adaz_Cabezas_%e2%80%9cLa_Parrillera%e2%80%9d
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